Cada 21 de septiembre se celebra el “Día Internacional de la Paz”, fecha que festeja el poder de la humanidad para construir un mundo pacífico y sostenible, con la paz como un derecho humano fundamental, centrado en la garantía de tener libertad para ser feliz, poder trabajar, tener salud, educación y recreación en familia y bien común.
En Nicaragua gracias al Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, presidido por el Cmte. Daniel Ortega y la Cra. Rosario Murillo, día a día se trabaja con una cultura de paz centrada en la persona, familia y comunidad, fundamentada en el enfoque de derechos con un especial énfasis en la reducción de la pobreza.
Por otro lado, es importante mencionar que parte de la garantía de la paz para las familias, es la seguridad y soberanía alimentaria, con la implementación de programas y estrategias que luchan por el desarrollo de la economía familiar y la igualdad de género, esto como pilar fundamental en la restitución de derechos de todos y todas.
La paz es un tesoro patrimonial de Nicaragua, tierra abonada con sudor y sangre que recordamos y resguardamos día a día con amor, valor y respeto; la paz es fruto de las luchas y victorias de hombres y mujeres aguerridos de nuestro pueblo, es por ello que, en honor a su legado, seguimos firmes en la defensa de los ideales revolucionarios que nos cobijan con el rojo y negro en el corazón y el azul, blanco y azul en la sangre.
La celebración del “Día Internacional de la Paz”, se da en el mes de septiembre vitorioso, mes de la patria, del amor familiar y nacional, donde desde cada rincón del país, las familias nicaragüenses hacen relucir sus derechos, con festivales, ferias, desfiles escolares y visitas a sitios turísticos, disfrutando de las vacaciones patrias que solo en esta tierra soberana, digna e independiente se viven, es por ello que el compromiso latente en la defensa de la paz, el decoro y la dignidad nacional no se detiene, por que Nicaragua es tierra de hombres y mujeres valientes, trabajadores y guerrilleros.