38 años atrás Nicaragua daba un paso gigantesco y acertado entorno a su modelo de amor, igualdad, hermandad y solidaridad; un 30 de octubre del 1987 se publicaba en La Gaceta Diario Oficial la “Ley N°. 28, “Estatuto de Autonomía de las Regiones de la Costa Caribe de Nicaragua”, estableciendo el Régimen de Autonomía de las Regiones en donde habitan las Comunidades de la Costa Caribe y reconociendo los derechos y deberes que corresponden de conformidad con la Constitución Política del país.
La aprobación de la ley tiene sólidos cimientos en el programa histórico del Frente Sandinista de Liberación Nacional, el que traza con meridiana claridad cómo la inclusión de la Costa Caribe será vital para la construcción de una patria revolucionaria y es que la Autonomía es Revolución, una revolución de carácter popular que reconoce el fortalecimiento de la nación basado en la historia e identidad particular de todos los pueblos originarios.



A 38 años de la publicación de la ley, la Revolución Popular Sandinista ha estimulado el florecimiento de los valores culturales y ancestrales del Caribe; desde el norte al sur se ha impulsado el desarrollo en la educación, salud, infraestructura, economía y demás ámbitos sociales, a través del Subsistema Educativo Autonómico Regional (SEAR) se ha implementado una Educación Intercultural Bilingüe, de la mano de programas como la entrega de la Merienda Escolar, útiles escolares y regalo de juguetes, los que unen a las familias y comunidades de la Costa Caribe con las demás zonas del país, porque son programas a nivel nacional.
Desde 2009 a la fecha, el desarrollo de los Modelos de Atención de Salud Interculturales MASIRAAN y MASIRAAS parte del Modelo de Salud Familiar y Comunitario (MOSAFC) han garantizado una atención de calidad y con gratuidad para los oriundos, quienes también cuentan con el Instituto Nacional de Medicina Natural, Tradicional y Terapias Complementarias (IMTC) mediante el cual se desarrollan sus prácticas tradicionales como pueblos afrodescendientes, usando plantas, semillas, frutas, insectos y animales para el tratamiento de distintos padecimientos.

Además, la construcción del Hospital Regional Nuevo Amanecer en Bilwi es una de las mayores obras de inversión e importancia para la población mayoritariamente mayangna y miskitu, a lo que se suma la adquisición de ambulancias acuáticas por parte del Ministerio de Salud y la remodelación en los Hospitales Primarios de Kukra Hill y Laguna de Perlas, así como el Hospital Escuela Ernesto Sequeira de Bluefields, el que actualmente cuenta con un moderno departamento de Oncología.
La infraestructura vial con el Rio Wawa Boom también destaca, al ser el único que vincula estratégicamente al Caribe Norte con el Centro y Pacífico de Nicaragua, a la par, los proyectos portuarios cobran relevancia, como el mejorando y equipamiento de los puertos de El Rama, El Bluff y Arlen Siu, sin mencionar el Puerto de Aguas Profundas en Bluefields, que abrirá paso a nuevas inversiones extranjeras en la región.


Los aeropuertos de Puerto Cabezas y Corn Island también simbolizan la importante inversión en la zona y a la vez el fomento de la economía y programas sociales, esto como parte de la Estrategia de Desarrollo de la Costa Caribe y el Alto Wangki y Bocay 2019-2029, misma que se centra en 4 ejes como: Desarrollo socio cultural, Desarrollo económico territorial con enfoque de cambio climático, Transformación productiva y económica y Fortalecimiento de la institucionalidad autonómica.
Hoy, la Costa Caribe nicaragüense es vivo ejemplo de que la autonomía es una herramienta poderosa de transformación social y de justicia histórica, una herramienta que solo pudo otorgar el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, mismo que con su sabio accionar ha materializado los sueños de miles y miles de familias nicaragüenses generando bienestar, dignidad y esperanza para caminar con mayor fuerza hacia un futuro de equidad, identidad y protagonismo.














